Después de todo, la salud por Luis Javier Crisóstomo

“Quédate en casa” expresión en uso en distintas partes del mundo cuyo efecto esperado es que ayude a proteger a las personas del contagio por el Coronavirus. El asunto es que, en un país como Guatemala, las condiciones desiguales no ofrecen las mismas oportunidades para todas las familias. El “Quédate en casa” después de dos meses ya empieza a generar conflictos porque muchas familias están sin comida. Los pequeños agricultores que producen verduras, frutas y granos básicos se encuentran con dificultades para vender sus productos. El contenido de las normas temporales en días de calamidad, deben ser muy bien explicadas en idioma Español y con traducción simultánea a todos los idiomas de Guatemala. Para esto, el Presidente debe apoyarse en la Academia de Lenguas Mayas de Guatemala para que comisione al personal que traslade el contenido del mensaje del Presidente a las regiones lingüísticas correspondientes de manera simultánea. Al ser Guatemala un país integrado por pueblos diversos, en cada pueblo hay otros mecanismos de comunicación que funcionan de manera efectiva y pueden posibilitar la comunicación a nivel de comunidades locales en tiempos de emergencia que necesitan de acciones inmediatas.

Las instituciones oficiales de salud deberían revisar los datos y la información creíble del estado de los servicios de salud donde funciona algo en la actualidad como el caso de los hospitales en las cabeceras departamentales, los Centros de Atención Permanente en las cabeceras municipales y de uno que otro puesto de salud en algunas comunidades locales. Así mismo, es importante hacer estudios dónde se deben construir hospitales en regiones estratégicas en cada departamento y Centros de Atención Permanente en aldeas seleccionadas cuidadosamente para responder a las necesidades de atención de salud de las personas de todas las edades. Las afirmaciones del Presidente acerca de los recursos disponibles en los hospitales amerita de un monitoreo permanente por qué el personal de salud en muchos casos dice lo contrario. Aquí es importante que los mecanismos de control del buen uso de recursos públicos estén funcionando muy bien.

La diversidad de pueblos con que cuenta el país, es una oportunidad de visiones y prácticas que hay para atender la salud. En estas circunstancias, el Ministerio de Salud debe realizar investigaciones sobre los principios, procedimientos y recursos que los pueblos originarios tienen para la conservación de la salud, el uso de las plantas medicinales, el tipo de alimentación natural que es conveniente conservar y el esfuerzo por la felicidad de todos. Se ha mencionado en los últimos años la importancia de contar con un sistema de salud intercultural que bien puede aportar para el bienestar y alegría de todos los pueblos de Guatemala. Con una visión conjunta, esfuerzo conjunto, transparencia en el uso de los recursos públicos, perfil competente del personal de salud y cobertura total de los servicios de salud, es posible el desarrollo integral que requiere Guatemala.

El Ministerio de Salud debe acercarse a la Universidad de San Carlos de Guatemala, revisar cuán actualizados están los planes de estudios para la formación de médicos que necesita el país, qué especializaciones son necesarias para los tiempos actuales y los que vienen, la calidad y cantidad de médicos que necesita el país donde la cobertura de los servicios públicos de salud es deficiente o nula. El Coronavirus vino a despertar a los guatemaltecos sobre la importancia de contar con el mejor servicio de salud pública que debe atender a todos.

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Ignacio EspañaComentario