Dos epidemias; del hambre y la obesidad por Julio Hernández Estrada

The Boston Globe, (Estados Unidos de América), reporta, en mayo 16, que “La epidemia de hambre es salvable, pero en este momento, afecta a todos en el mundo”. Niños con hambre no pueden aprender, el cerebro no se desarrolla, no crece, no capta, no conectan las neuronas. Sin embargo, La Organización Mundial para la Agricultura y la alimentación, FAO, reporta alrededor de 800 millones de personas desnutridas en el mundo, y cerca de 1,600 millones de personas con sobrepeso u obesidad. Las personas con sobrealimentación constituyen el doble de los desnutridos. ¿Por qué vende más, políticamente, niños con hambre, que niños obesos? En ambos casos mueren; unos de un mal y otros de diabetes, paros cardíacos, etc. En el mundo, mueren anualmente más habitantes por problemas de metabolismo; sobre peso u obesidad, que desnutridos. Desde luego, impacta más personas que mueren de inanición, hambre, descalcificados, con la piel pegada al cuerpo, que personas infladas de grasa y metabolismos disfuncionales. En ambos casos, los impactos por muertes prematuras, son lamentables y detestables económicamente, son personas que dejan de trabajar por muerte, enfermedad y permisos laborales por incapacidades. El hambre no es una epidemia, como el sobre peso y la obesidad. El hambre es producto de falta de empleos e ingresos de los padres de niños desnutridos. La epidemia de sobre peso y obesidad, es multifactorial; comida chatarra, sedentarismo, falta de educación, adicción a la televisión y videojuegos, celulares, etc. En fin, la vida moderna. El hambre, es falla del sistema capitalista, que no genera empleos, ni retribuye adecuadamente a los pocos que tienen empleo. Irónicamente, hoy en día existe la combinación de la doble carga, desnutrición y sobre peso u obesidad. Hay gente pobre, con sobre peso y obesidad. ¿Qué papel juegan los agrónomos? La profesión es para aumentar la productividad, sin dañar el ambiente. Generalmente, se falla en el segundo propósito. Los agrónomos no son responsables de generar empleos, ni ingresos, ni diseñan políticas de distribución del ingreso, ni asistencia social, ni luchan por bajar el Coeficiente de Gini, ni la desigualdad estructural del país. En cierta manera, la gente muere cada día, por falta o exceso de alimentos. Eso sin contar, los que mueren por ingerir alimentos contaminados o en mal estado. La muerte es un acompañante de procesos biológicos, económicos y políticos. Todo está relacionado, interconectado. Uno es consecuencia del antecesor. La mala alimentación, carencias y excesos, vulnera las defensas y entran enfermedades. La salud se deteriora.

Antes se decía y se sigue con el discurso que el socialismo produce hambre y pobres a montón. Sin embargo, en 1987, con la caída del Muro de Berlín, oficialmente desaparece el sistema socialista y comunista en el mundo. Pero el número de pobres sigue creciendo, exponencialmente. ¿Qué pasa? ¿Cómo acomodar el discurso neoliberal? Naciones Unidas y sus diferentes programas reitera la declaración que Cuba no tiene desnutridos, especialmente niños. ¿Cómo explicar ese fenómeno? Irónicamente, Estados Unidos de América, tiene cifras crecientes de pobres y desnutridos. ¿Es cuestión de sistema político, capitalismo vis a vis socialismo? ¿Tiene fallas el discurso ideológico? ¿Usted que opina?

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